El Tribunal en lo Criminal Nº 3 de Jujuy comenzará este jueves otro juicio oral y público contra la dirigente social Milagro Sala, esta vez acusada por la sustracción y destrucción de un expediente de la justicia provincial.
“Sentí miedo”: “Shakira” Guerrero pidió la custodia luego de la respuesta de Milagro SalaMilagro Sala será juzgada como supuesta determinadora directa del delito de “cohecho activo y de sustracción de documento publico, en concurso ideal; con el de sustracción o destrucción de documento, dos hechos en concurso real”.
También están imputados este nuevo caso el abogado Antonio Alberto Bellido y el empleado judicial Marcos Daniel Romero.
“Milagro Sala guardaba la plata en armarios de doble fondo”Romero está imputado como supuesto autor de los delitos de “cohecho pasivo y sustracción de documento público, en concurso ideal con el de sustracción o destrucción de documento, dos hechos en concurso real, en carácter de coautor y todo ello en concurso ideal con el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público”.
En tanto, Antonio Bellido se encuentra acusado como supuesto autor de los delitos de “Cohecho activo y sustracción de documento público, en concurso ideal con el de sustracción o destrucción de documento, dos hechos en concurso real”.
Causa Milagro Sala: otro arrepentido respaldó las revelaciones de “Shakira” y compromete más a la dirigente socialDe acuerdo al requerimiento del Ministerio Público de la Acusación, el 22 de diciembre de 2009 Nelson Echenique, auxiliar administrativo del Juzgado de Instrucción en lo Penal Nº 3 – Secretaría Nº 6- se encontraba en dependencias del Poder Judicial tras retirarse de la oficina donde prestaba sus servicios, a los fines de hacer firmar un despacho. En esa situación, Romero, auxiliar administrativo y compañero de oficina de Echenique, habría aprovechado que estaba solo en la oficina, para apoderarse ilegítimamente de dos expedientes que se tramitaban en dicha dependencia.
Milagro Sala rechazó las acusaciones de su ex colaboradora y apuntó contra Gerardo MoralesSe trata de los expedientes identificados con el Nº 1401/07 caratulado “Ávila y Páez, p.s.a. del delito de Tentativa de Homicidio, compuesto por cuatro cuerpos de 200 fojas cada uno; más el expediente Nº 6134 asunto: Recurso de Inconstitucionalidad interpuesto en el Expte. Nº 28/08 Sala de Apelaciones Cámara Penal – Recurso de Apelación interpuesto por la Dra. Cristina Marco Agente Fiscal Nº 3 habilitada en el Expte. Nº 1401/07.
El imputado Romero los habría sacado del entorno del Juzgado, tal como lo habría planeado previamente con otro de los acusados, Alberto Bellido, por “requerimiento e instrucción de Milagro Sala, con el fin de hacer desaparecer dichos expedientes”, en el que se encontraban gravemente comprometidos integrantes del círculo de allegados a la Jefa de la Organización Barrial Tupac Amaru, acusados de haber cometido el hecho delictual de un enfrentamiento con armas de fuego en el que resultó gravemente herida una niña.
A los tres días de sustraído ilegalmente el expediente judicial, el 25 de diciembre de 2009, en horas de la noche, “Alberto Bellido habría pasado a buscar en una camioneta a Romero por su domicilio, este habría subido a la misma con los expedientes en una bolsa negra tipo consorcio”, informó prensa de la Justicia de Jujuy.
Seguidamente, ambos se habrían dirigido “a la casa de Milagro Sala, en donde Bellido le habría manifestado a ésta que ya tenía el expediente y que lo iban a quemar".
Luego, Bellido y Romero se habrían dirigido al barrio Norte, a un basural ubicado en la Ruta provincial 2, en donde ambos, luego de descender del vehiculo con el expediente, “procedieron a desprender las hojas o fojas del mismo y quemarlas, logrando su destrucción total”.
Por esa acción el inculpado Bellido habría pagado al imputado Romero una importante suma de dinero, que habría sido previamente entregada al primero de los nombrados por Milagro Sala, a ese efecto.
Posteriormente, Bellido habría dejado a Romero en las inmediaciones de la vieja Terminal, para dirigirse después al domicilio particular de Sala con la finalidad de anoticiarla que el trabajo ya estaba hecho.